El año en que me hice mayor
Me gusta escribir mirando al año que termina y luego compartirlo en mi blog, igual que me gusta escribir en mi diario y de vez
Me gusta escribir mirando al año que termina y luego compartirlo en mi blog, igual que me gusta escribir en mi diario y de vez
El domingo 2 de julio por la mañana volé de Madrid a Oporto. Luego cogí un metro al centro de la ciudad, visité la catedral,
El camino de Santiago es de una riqueza enorme, lo mires por donde lo mires. Tiene todo y está tremendamente vivo, es un tesoro enorme. Si te gusta la naturaleza, pasar todo el día al aire libre, ver cada día el amanecer, escuchar a los gallos saludar al sol, contemplar todo tipo de aves, ir viendo el cambio del paisaje, cruzando mesetas y montañas, nadando en ríos, es pura felicidad.
Ahora que se vislumbra su fin, creo que el mayor regalo que nos ha traído el confinamiento ha sido el tiempo para la escucha. Propia
La noto nerviosa, inquieta. Se ha cambiado de ropa tres veces ya, finalmente se ha puesto ese abrigo que tanto me gusta porque pesa mucho
La propuesta de Esther Santiago me llegó en el momento justo, decía algo asi: «Partiremos de Santiago a Finisterre, un camino milenario hacia el antiguo
A finales de enero me operaron la rodilla en un gran hospital público. Recambio de ligamento, sutura de menisco, costura de tendones. No me ha quedado otra que parar, reposar y dejarme cuidar. Los puntos y las heridas. La rodilla hinchada y el cuerpo dolorido. Gratitud hacia el o la donante del tendón que ahora me sostiene. También, y sobre todo, a la bendita sanidad pública que tenemos, verdadero milagro nuestro de cada día.
La vida paciente transcurre en las salas de espera.
Recuperar la alegría. Celebrar su tímido pero imparable regreso. Dormir a pierna suelta. Oler la tierra al atardecer. Sonreír a los girasoles. Nadar a diario
Vivo en una calle sin coches, llena de gatos. Con pequeñas casas bajas y humildes, a un lado, y bloques feos y sin balcones al