Hace unos años comencé el camino de Santiago siguiendo el camino francés desde Roncesvalles. Las primeras etapas las hice sueltas como conté en esta entrada. Luego, en el verano de 2019 hice el tramo que va de Santiago a Fisterra. Este mes de junio, conforme se aproximaba el verano, no tenía ningún plan en mente para mis vacaciones. Un día pensé que tal vez podría retomar mi plan de completar el camino antes de cumplir los 70 haciendo algunas etapas más. En concreto pensé en hacer tres etapas y, si mi rodilla me lo permitía, seguir hasta Burgos (seis etapas en total).
Con esa idea en mente salí a caminar desde Torres del Río, en Navarra, donde yo había finalizado la última etapa hace años, el 10 de julio. El pasado martes 3 de agosto entré caminando en la plaza del Obradoiro, final del camino a Santiago de Compostela. Al llegar rompí a llorar de emoción, alegría, orgullo…Muchas emociones muy intensas en ese momento único y precioso, pero todo ese día y durante parte de los siguientes no me podía quitar la sensación de incredulidad. ¿De verdad había llegado andando a Santiago desde Navarra? ¿En serio? ¡Ni en mis mejores sueños me hubiera imaginado recorriendo más de 600 y pico kilómetros a pie, sola y con mi mochila a cuestas!
Creo que esa incredulidad mía refleja en parte como he hecho el camino, sin grandes expectativas, muy centrada en lo que vivía cada día en tiempo presente, sin atreverme a pensar siquiera en que llegaría hasta Santiago o en que pasaría después. Improvisando bastante y aceptando lo que el camino me trajera. Yendo a albergues municipales o de donativo, muchas veces sin reserva previa (suerte que con la pandemia hay muy pocos peregrinos y es fácil encontrar alojamiento). Ahora llevo unos días saboreando todo lo vivido y lo comparto aquí como manera de agradecer todo el apoyo recibido y de animar también a quien se lo plantee a hacer su camino, igual que a mi me han ayudado muchísimo los aprendizajes y experiencias de otras peregrinas y peregrinos.
El primer día se me ocurrió compartir una imagen en Instagram y fue tan bonita la respuesta que seguí haciéndolo a diario. Como no pude responder a todas las preguntas, os dejo abajo el resumen de las 25 etapas que hice y el enlace a las entradas de mi diario del camino con sus correspondientes fotos, aunque las imágenes no están ordenadas cronológicamente (con tiempo iré poniendo la ubicación de cada una). No llevé ningún contador de pasos ni de kilómetros, así que el cálculo de las distancias a aproximado e inexacto, pero siento que se queda corto ya que varios días anduve de más, me perdí, elegí la opción más larga o seguí caminando por la tarde. Por eso digo “más de 640 km”, no necesito saber cuántos fueron exactamente.
El camino de Santiago es de una riqueza enorme, lo mires por donde lo mires. Tiene todo y está tremendamente vivo, es un tesoro enorme. Si te gusta la naturaleza, pasar todo el día al aire libre, ver cada día el amanecer, escuchar a los gallos saludar al sol, contemplar todo tipo de aves, ir viendo el cambio del paisaje, cruzando mesetas y montañas, nadando en ríos, es pura felicidad. Disfruté mucho sacando fotos. Como reto físico o deportivo, a mi me ha permitido probarme, llevarme a mi límite tal vez (que en mi caso descubrí tiene mas que ver con el calor y la deshidratación que con los km o las cuestas), y descubrir que soy más fuerte de lo que pensaba y que mis piernas son estupendas. Como viaje y recorrido, es precioso y está lleno de historia y arte, especialmente románico, de belleza tan insuperable como la catedral de León, las iglesias de Villalcázar de Sirga, Frómista y muchísimas otras. En lo gastronómico es un lujo, vas transitando desde las viñas de la Rioja y el Duero hasta los pastos gallegos, probando la insuperable gastronomía local en forma de menús, degustaciones y tapas que, tras caminar 20 o 30 km, es imposible que te sepan mejor. En lo social, es lugar ideal para conocer a gente de muchos países y orígenes y edades de lo más diversos. Yo empecé sola y terminé con un maravilloso grupo “burbuja” de peregrinos: sin su apoyo no creo que lo hubiera logrado. A nivel humano, la generosidad de los hospitaleros en lugares como la ermita de San Nicolas de Bari en Puentes de Fitero, la @casadelosdioses llegando a Astorga o en la casa de Marixa en As Rozas Paradela me conmovió profundamente. En lo personal, espiritual y trascendental, la apertura y los aprendizajes que te trae el camino son demasiado íntimos y numerosos para contarlos aquí, al menos para mí, potentes, y muy sanadores y que seguro marcan un antes y un después en la vida de la inmensa mayoría de peregrinos. Tengo montañas de anécdotas e historias deliciosas para saborear.
Me siento muy contenta, feliz, agradecida y esperanzada…Gracias a quienes me habéis ayudado de una forma u otra. Os dejo pues estos enlaces más prácticos y os deseo de corazón: ¡buen camino!
Etapas:
- 10 julio: Torres del Rio – Logroño 20 km
- 11 julio: Logroño – Nájera 29 km
- 12 julio: Nájera Santo – Domingo de la Calzada 20,7 km
- 13 julio: Santo Domingo de la Calzada – Belorado 22km
- 14 julio: Belorado- Santovenia de Oca 27 km
- 15 julio: Santovenia de Oca- Burgos 25 km
- 16 julio: Burgos Hontanas 30 km
- 17 julio: Hontanas- Puente Fitero 18,5
- 18 julio: Puente Fitero- Villalcázar de Sirga 32km (por Villovieco)
- 19 julio: Villalcázar de Sirga – Terradillos de los Templarios 32km
- 20 julio: Terradillos de los Templarios – Bercianos del Real Camino 23,2 km
- 21 julio: Bercianos del Real Camino – Mansilla de las Mulas 26,3 km
- 22 julio: Mansilla de las Mulas – León 18,5 km
- 23 julio: León San Martín del Camino 24,6 km
- 24 julio: San Martín del Camino – Astorga 24 km
- 25 julio: Astorga – Foncebadón 25,8km
- 26 julio: Foncebadón – Ponferrada 27 km
- 27 julio: Ponferrada- Villafranca del Bierzo 24,2 km
- 28 julio: Villafranca del Bierzo – O’ Cebreiro 28km
- 29 julio: O’ Cebreiro Samos 31 km
- 30 julio: Samos – Mercadoiro 33km
- 31 julio: Mercadoiro – Palas do Rei 30,2 km
- 1 agosto: Palas do Rei – Arzúa 28,5
- 2 agosto: Arzúa – Lavacolla 28,8 km
- 3 agosto: Lavacolla – Santiago de Compostela 10 km
Mejores ríos para bañarse:
- Piscina fluvial de Molinaseca
- Mansilla de las Mulas
- Piscina fluvial de Villafranca del Bierzo
- Piscina fluvial de Cacabelos
- Nájera
Mejores tortillas de patatas:
- San Juan de Ortega, en el Descanso de San Juan.
- O´Ceadoiro en el alto de Santa Irene (@OCeadoiro)
Webs y aplicaciones que más he usado:
- Gronze https://www.gronze.com/
- App Buen Camino https://www.editorialbuencamino.com/
Podcast de historia del camino
- https://memoriasdeuntambor.com/el-camino-de-santiago
6 comentarios en “Mi camino a Santiago”
Pingback: Mi camino portugués a Santiago - Ibone Olza
Se te ve re-feliz… ¡y lo que me alegra verlo y compartirlo!! Gracias por las indicaciones, que nunca vienen mal (sobre todo las de tortilla de patatas!!). Un enormísimo abrazo. ¡¡Nos vemos en poco tiempo!!
Ole tú, amiga. Te he seguido durante todo este mes de Julio con admiración y orgullo. Un abrazo enorme campeona!!!
Hola Ibone, qué ilusión trasmites,me encanta. Yo hice el camino con 16 añitos, acompañada de mi padre y hermano y tuve y aún tengo esas mismas observaciones… descubrimiento de mi misma y del entorno cambiante a ritmo de paso, descubrimiento de los demás, descubrimiento de la naturaleza y del paisaje, y del románico… y de tantas cosas.
Ahora con ganas de volver a hacerlo si puede ser con mis hijos.
Muy recomendable!!
Gracias, gracias y gracias. Por cuidarte y por compartir, por hacer el camino para todas las personas y por hacerlo tuyo y para ti. Eres una mujer generosa y enorme, enorme en sabiduría, en experiencias y en emociones y las regalas con todo tu amor. Las que te conocemos (un poquito) y te hemos seguido en el camino nos sentimos tremendamente orgullosas de compartir un trocito del mismo contigo. Gracias mujer, peregrina y amiga
Enhorabuena Ibone!!!