¿En qué momento abandonamos la infancia? Y nuestros hijos e hijas, ¿cuándo la dejarán atrás? Qué difícil saber…Probablemente no haya una fecha ni un momento concreto en el que se abandone definitivamente el territorio mágico de la vida pero si lo hubiera, tal vez el momento en que se deja atrás la escuela primaria podría servir para señalar de cierta manera esa transición.
Estos días mi hija pequeña termina la educación primaria y con eso dejamos atrás el cole en torno al cual han girado los últimos nueve años de nuestra vida. Me toca despedirme de uno de mis lugares favoritos de Madrid: el patio de mi recreo. El lugar donde he pasado infinidad de tardes observando a los niños y niñas a la vez que a los árboles. Demasiado especial para mi, ahora que intento plasmarlo en palabras. Me vienen las hojas de los árboles, los juegos, las conversaciones de tantos pequeños y pequeñas… Uno de esos pocos lugares donde todo parece estar en armonía.
No sé cuántas horas he pasado en ese patio intentando llevarme a mis hijos del cole a casa. Cuanto antes llegáramos mejor y cuanto más tarde nos fuéramos mejor también. Tantos recuerdos mágicos, tanto cariño y amor por la enseñanza. Aprender disfrutando y jugando, con maestros de los buenos, de los mejores, de los inolvidables. Los recitales de poesía, las clases de mitología. Las salidas al monte, al campo, al barrio en carnaval.
Un buen día tus hijos son más altos que tú y a ti te toca despedirte de tu patio favorito. Te das cuenta entonces de cuanta falta hacen espacios así, de convivencia entre grandes y pequeños, de aprendizaje verdadero.
Este año en ese patio tuvieron que talar dos olmos. Al percibir su ausencia sentí mucha pena, pero luego encontré en el hall del colegio un precioso mural hecho por la clase de segundo de primaria. «Han talado los olmos del colegio» decía el título, seguido de varias fotos de los árboles antes de ser talados. El texto explicaba como la directora del colegio había tenido que tomar la difícil decisión de talar los olmos del jardín de los pequeños tras consultar con los expertos que había confirmado lo enfermos que estaban los olmos y el riesgo que había de que se cayeran. «Nos ha dado pena y los echaremos de menos«, habían escrito los niños. La buena noticia, añadían, era que la directora compraría dos árboles nuevos y que podrían verlos crecer y jugar bajo sus sombras. Ese hermoso requiem por dos olmos en cartulina y con letra infantil me sirvió de consuelo. No sólo de la pena por los árboles: también de la que ahora me da dejar atrás esta preciosa etapa vital.
Gracias y hasta siempre querido cole.
9 comentarios en “El patio de mi recreo”
Pingback: Tiempo de silencio | Ibone Olza
Ibone, estoy en casa en Buenos Aires leyendote, y sabiendo que en diciembre pisaré nuevamente ese patio, de esa escuela hermosa!!! con Agus, comparto cada línea de tu texto: abrazo
Es bonito descubrir, sintiendo la añoranza de esa infancia donde estuviste inmersa hace tiempo, que has tenido exactamente las mismas emociones que esos niños del colegio (en plena infancia). Felicidades por la sensibilidad!
Muy bonito. Dejo el punto de vista de una profesora: http://lahistoriadegabriele.blogspot.com.es/2013/07/sobre-el-fracaso-escolar.html
Gracias a ti, Ibone, por dejarnos disfrutar de tus niños y verlos crecer.
Que bonito Ibone!!!! Te mando un abrazo tipo oso para estos momentos. Estoy en el tren camino a Barcelona para seguir con La promoción, hablamos antes de que nos vayamos de viaje guapa. Besitos, Ari
Enviado desde mi iPhone
Es precioso, me llega al corazón. ¡qué suerte tengo de disfrutar todavía unos añitos más ! Veré el colegio y a sus niños como crecen.
Un beso, Margarita
Maravilloso Ibone!!!!
Echaremos de menos tantas cosas, pero lo importante es que nadie nos puede quitar esos recuerdos.
Yo espero de todo corazón, que no se me borren nunca de la memoria.
Y como tu digo GRACIAS COLE POR HABERME DADO UNOS RECUERDOS TAN DELICIOSOS.
Celia
Tendrás nuevos espacios con los que disfrutar, porque lo especial no son los lugares, eres tu quien los hace especiales
Carla
http://www.lasbolaschinas.com